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viernes, 24 de diciembre de 2010

En esta época es bueno recordar....

Hola amigos, para estas señaladas fechas. Os queremos desear que cumplais todas las metas que tengais en mente, que no decaigais y sobre todo que seais felices y sigais luchando por nuestros hermanos no humanos.
Os proponemos que leais esta felicitación que nos ha llegado a través de difusión.

-La Mejor Felicitación que Hayamos Recibido Este Año--

Feliz Navidad a todos.



Ésta es mi felicitación para todos aquellos que se preocupan por dar a los animales una vida mejor: una pequeña reflexión.


Mi momento preferido de la Navidad es la Noche del Gallo. Cuando personas anónimas retan al frío y a la oscuridad de la noche para unirse en un lugar cálido y alegre. Son como pequeñas luces que se unen en una luz más grande, y allí se sienten como en casa.


Me he dado cuenta de que todos aquellos que nos dedicamos, como podemos, a darle una vida mejor a nuestros peluditos amigos, somos algo parecido a las luces de la Noche del Gallo, y todas esas luces unidas formamos una red.


Imaginad todas las luces anónimas que hay en vuestra ciudad: en aquel piso donde alguien está curando la tristeza de un recién llegado, enfrente de aquel polideportivo donde dos personas han quedado para recoger un animalito que viene de fuera, aquella señora que cruza el polígono para alimentar a un par de perritos, el anciano que recurre a la madrugada para que no le vean alimentar a la colonia de gatos y adecentar las cajas plastificadas que ha manufacturado para ellos, las que visitan la perrera con el corazón encogido, la familia que llora la pérdida de su mejor amigo y vive enfrente del centro comercial que sueles visitar…


Cada una de esas personas es un nudo de la red, y si unimos con una línea todos esos nudos tenemos una gran red en la que siempre esperamos que caiga el mayor número de animales posible. Una red de esperanzas, una red de sueños cumplidos para ellos.


Desgraciadamente muchos se nos escapan entre los agujeros y los perdemos para siempre, y algún nudo de la red se estira demasiado y se rompe. Pero nosotros somos la única red de la que estas almas valiosas disponen, y nos esforzamos por cubrir los agujeros y sustituir a los nudos que se han ido, deseando que vuelvan a aparecer por algún otro lado.


Al igual que en Navidad, nosotros nos adentramos en la noche oscura para poner en esa noche un poco de luz. Una red invisible que brilla sin que nadie se percate de ello, sólo aquellos a los que le cambiamos la vida.


Espero que esta red sea cada vez más tupida, que tenga cada vez más nudos y ya no se nos escape ninguno de los nuestros por los agujeros. Que seamos tantas luces que brillemos como una estrella y calentemos como una gran hoguera, alrededor de la cual puedan sentirse a salvo todos aquellos por los que nos preocupamos.


Y por pedir, ojalá que en el futuro ya no seamos necesarios, y podamos sentarnos charlando tranquilamente de todo lo vivido, alegrándonos por aquellos a los que hemos salvado, y esperando encontrarnos en algún otro lugar con aquellos que la crueldad del mundo nos arrebató.


Que hagamos desaparecer la noche oscura que les rodea.
FELIZ NAVIDAD